Avances tecnológicos en la operación de Bypass Gástrico
Cirugía laparoscópica y anestesia mini-invasivas. Cirugía Robótica da Vinci.
Los avances tecnológicos en la operación de Bypass Gástrico o reducción de estómago, así como en otras técnicas quirúrgicas, nos permiten la realización de intervenciones cada vez más complejas técnicamente, con mínimo riesgo, aportando seguridad y mejorando los resultados de pérdida de peso. Este hecho ha cambiado totalmente el panorama de las operaciones de obesidad.
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Seguridad en la cirugía, tecnología y especialización de los cirujanos.
El uso de los últimos avances en cirugía por laparoscopia y las aplicaciones técnicas mas avanzadas, podemos realizar intervenciones en pacientes cada vez mas obesos, y con mayor seguridad, con una recuperación sorprendente y una tasa de complicaciones mínima. Hoy día, en manos de equipos muy experimentados, la intervención de obesidad es segura, y no supone un gran riesgo como hace años.
La especialización de los cirujanos ha sido un factor clave para la reducción de las complicaciones en estas operaciones. Las principales Sociedad Científicas (SECO, Sociedad Española de cirugía de la Obesidad en el caso de España), han desarrollado mecanismos de formación y de acreditación de la cualificación del cirujano. Aunque esta acreditación no es obligatoria desde el punto de vista legal, sí que es muy importante y sirve a los pacientes para tener una idea más exacta y «certificada» del novel de formación y experiencia del cirujano y del equipo.
Por otro lado, el uso de la tecnología avanzada, permiten una reducción drástica, también cercana al 0% de las complicaciones quirúrgicas de las operaciones de obesidad.
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Preparación del paciente, es fundamental para la reducción del riesgo.
En todo caso, «lo delicado» muchas veces es el propio paciente obeso, pero sobre todo cuando padece problemas cardiopulmonares o metabólicos, y por ese motivo es tan importante la preparación preparatoria con el apoyo de un equipo. Una buena preparación reduce el riesgo global de la cirugía en un 20-30%. Durante esta preparación, se busca que el paciente pierda parte de la grasa acumulada en el hígado y en el entorno de los intestinos, elimine los líquidos sobrantes, y mejore el estado de forma cardiovascular. Con todo esto, se mejoran las posibles enfermedades asociadas a la obesidad del paciente, como la hipertensión, la elevación del colesterol y triglicéridos, los edemas periféricos. El paciente con una buena preparación antes de la cirugía, acude a la cirugía con una importante mejoría global, y eso nos permite reducir a casi el 0% las complicaciones médicas postoperatorias asociadas a la cirugía.
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Avances tecnológicos en la operación de Bypass Gástrico
Hasta hace pocos años, la cirugía del Bypass Gástrico se realizaba abriendo el abdomen, y utilizando métodos quirúrgicos y anestésicos muy agresivos, porque se creía que cuanto mayor disponibilidad de responder a una situación difícil durante la cirugía, mayor seguridad para el paciente.
Sin embargo, con la alta especialización de los cirujanos, y el desarrollo imparable de la tecnología, ha cambiado el panorama de la seguridad de las operaciones de obesidad de una forma drástica. Fíjense que la tecnología por si sola, actualmente no es suficiente, pero sumada a una formación de excelencia, se consigue una eficacia y seguridad, con posibles complicaciones y mortalidad casi inexistentes.
Conforme hemos ido desarrollando los cirujanos, habilidades técnicas, conocimientos y confianza con este tipo de pacientes, hemos aprendido que tantas precauciones alargan y complican el proceso, causando finalmente mas problemas que beneficios a los pacientes.
Los avances tecnológicos en la cirugía y en la anestesia, unidades a una buena preparación preparatoria, nos ha permitido el desarrollo de protocolos «Fast Track» de rápida recuperación postoperatoria, con ingresos de sólo 24 horas en la inmensa mayoría de los casos, lo que disminuye enormemente las complicaciones médicas que antes causaban las UCI (unidades de vigilancia intensiva) y los cuidados intervencionistas (vía central, alimentación parenteral, antibioterapia prolongada, inmovilización prolongada) con 4 a 8 días de ingreso hospitalario.
La cirugía por «LAPAROSCOPIA MINI-INVASIVA», se trata del uso de sistemas de asistencia automatizados como brazos semirobóticos, y trocares con incisiones mínimas, «sistemas de puerto único asistido», unido a sistemas de hemostasia, disección y sección y sellado de tejidos que consiguen una seguridad óptima.
La cirugía por ROBOT DA VINCI, se trata de un sistema de asistencia robótica al cirujano, donde el que opera sigue siendo el cirujano, el robot «NO» opera al paciente. Sin embargo aporta la ventaja añadida, de que simula mucho mejor los movimientos y la visibilidad que tendría el cirujano en el caso de realizar la cirugía con el abdomen abierto, como se hacía hace años. El acceso es igual que en la cirugía laparoscópica, a través de pequeños trócares, pero el robot aporta una sistema de realidad y manejabilidad muy cercana a la realidad, lo que aporta más seguridad y menor cansancio al cirujano.
Hasta no hace mucho, la operación de Bypass Gástrico tenía una mortalidad de 2-5%, y una frecuencia de complicaciones del 20-30% según los equipos. Actualmente con la cirugía laparoscópica, la cirugía robótica y los últimos avances técnicos anestésicos, podemos entrar en el abdomen bajo visión directa y sin causar lesiones, utilizamos avanzados sistemas de hemostasia que evitan sangrados y precisos sistemas de sección y suturas que permiten realizar estómagos más pequeños y muy seguros en cuanto a su estanqueidad. La frecuencia de fugas o fístulas ha disminuido enormemente. En nuestra casuística, la incidencia de fugas en menor del 0,1%, es realmente excepcional, y hemos desarrollados la metodología y conocimientos necesarios para resolverla de forma rápida y eficaz en el caso de que se produzca. Con todo conseguimos una tasa de mortalidad del 0% con un altísimo número de pacientes intervenidos.
Con la aplicación de la alta tecnología y un buen entrenamiento quirúrgico, conseguimos postoperatorios infinitamente más cómodo, con mínimas molestias, y con sólo 24 horas días de ingreso, y una vuelta a la vida normal a los 7 días.
Hoy día, la relación entre riesgo y beneficio para la operación de Bypass Gástrico por laparoscopia y en manos expertas, está muy a favor del beneficio que aporta la operación al paciente.
Y recuerde, que si usted espera a tener problemas de salud y preocupaciones o limitaciones permanentes por la obesidad, le está conduciendo a:
- Perder calidad de vida y disfrute de esa vida, todo el tiempo que espere.
- Aumentando el riesgo de padecer enfermedades graves como el infarto de miocardio o una hemorragia cerebral, durante el tiempo que persista con peso tan elevado.
- Aumentar el riesgo de la operación, cuando se de cuenta de que “finalmente no le quede otra alternativa”.
Dr. Jose Vicente Ferrer
Cirujano Bariátrico y Metabólico. Jefe de equipo