El café tras una operación de obesidad
Muchos pacientes se preguntan si el consumo de café tras una operación de obesidad son «compatibles».
Desde luego inicialmente, durante las 3 primeras semanas después de una operación de obesidad, NO se debe consumir café. Tampoco es conveniente tras una implantación de Balón Intragástrico. Recordemos que el café es una bebida irritante para el estómago.
Pero después de estas 3 primeras semanas, no hay contraindicación en que los pacientes puedan disfrutar del consumo de café tras una operación de obesidad. Como siempre lo importante es la cantidad y si acaso la forma de tomarlo (mas o menos fuerte o concentrado).
Es una duda que se repite en nuestros pacientes, y que siempre dan por hecho que les vamos a decir que no pueden tomar café…, así que les damos una alegría.
¿Cuál es el mejor tipo de café para consumir?
Lo ideal sería comprar el café en grano, moliéndolo inmediatamente antes de su preparación. De esta manera minimizaremos la pérdida de aroma, evitaremos la oxidación y se conservará mejor. Además, el proceso de tostado reduce la capacidad antioxidante del café si se compara con la del café verde, debido a la pérdida de compuestos polifenólicos y la formación de otros antioxidantes menos activos.
De todas formas, el grado de tostado solo la disminuye ligeramente, y por este motivo es más recomendable comprarlo de tueste natural antes que el torrefacto, ya que contiene peores propiedades. Por otro lado, hay que tener en cuenta que también se consume sustancias excitantes con el té o el chocolate, que a lo largo del día puede incrementar significativamente la ingesta total.
Riesgos del consumo de café tras una operación de obesidad
El excesivo consumo de café puede causar dependencia y tolerancia debido a su capacidad de estimulación mental. Para evitar una dependencia excesiva, es recomendable de vez en cuando eliminar el café durante unas semanas o sustituirlo por descafeinado.
Para las personas con insomnio, que le cuesta dormir, o tienen palpitaciones o ansiedad, sea cual sea el motivo, limitar el café puede ser una buena idea para minimizar estos problemas, sobre todo a partir de la tarde.
El café puede provocar problemas digestivos, como úlceras o reflujo gastroesofágico. Este es el motivo por el que recomendamos evitar las 3 primeras semanas el consumo de café tras una operación de obesidad y tras la colocación del balón intragástrico.
Beneficios del consumo de café tras una operación de obesidad
La cafeína tiene una capacidad estimulante del sistema nervioso central, ya que inhibe los sensores de cansancio del cerebro. Esto permite mantener despierta la atención y aumentar el buen humor. Además, se han demostrado mejoras cognitivas como mayor velocidad de reacción y de memoria, menor fatiga mental y física, etc.
El café también tiene un papel neuroprotector y antiepiléctico, ayudando a reducir el riesgo de padecer enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer o el Parkinson.
Por otra parte, el café tiene compuestos bioactivos como vitaminas, minerales y sustancias antioxidantes, que contribuyen a eliminar los radicales libres y pueden ayudar a contrarrestar los efectos negativos en la salud que provocan los daños oxidativos y que participan en el envejecimiento celular.
Además, como habitualmente se toma caliente, aumenta la temperatura del cuerpo, y esto ayuda a aumentar la lipolisis, ayudando a que el cuerpo queme principalmente las grasas como fuente de energía. Por este motivo, se suele recomendar su consumo en procesos de pérdida de peso.
De igual manera, el consumo de café tras una operación de obesidad puede aumentar el rendimiento deportivo, sobre todo en actividades de resistencia, ya que mejora la adaptación al estrés ocasionado por el esfuerzo físico, mejora la quema de grasas y aumenta el nivel de endorfinas, lo que nos hace más resistentes al dolor muscular post-entrenamiento.
También se ha estudiado la posible reducción del riesgo de algunos tipos de cáncer (sobre todo de colon y próstata) y la reducción de la probabilidad de padecer diabetes tipo II gracias a un consumo moderado de café.