OZEMPIC: EFECTOS SECUNDARIOS Y CONSIDERACIONES

La semaglutida o también conocido por su nombre comercial Ozempic, es un medicamento utilizado para controlar los niveles de azúcar en sangre en personas con diabetes tipo 2 y también puede ayudar en la pérdida de peso en individuos con obesidad. Sin embargo, su uso conlleva consideraciones importantes, ya que puede tener efectos secundarios y otras implicaciones que deben ser tomadas en cuenta por los pacientes y profesionales de la salud.

Como ya vimos anteriormente con otros fármacos agonistas GLP-1 (Saxenda) podemos decir que nos encontramos con una variedad de fármacos anti-obesidad que es especialmente efectivo para tratar la obesidad tipo I, especialmente cuando las causas son mayormente ambientales y suficientemente modificables con el cambio de hábitos.

En cualquier caso tendríamos que estudiar las causas de la obesidad y si el tratamiento farmacológico es la opción idónea, de lo contrario podríamos caer en el error de parchear el problema de obesidad con un tratamiento, que al dejarse de aplicar, implicaría una posible reganancia del peso original.

El Ozempic está pesado para utilizarse durante un periodo de tiempo determinado, no como un tratamiento de uso crónico, dicho esto podemos establecer una serie de efectos secundarios que suelen aparecer, normalmente al principio del uso del fármaco o con su uso prolongado.

Efectos secundarios a corto y largo plazo

A corto plazo, Ozempic puede causar efectos secundarios como náuseas, vómitos, diarrea y dolor abdominal. Estos síntomas suelen disminuir con el tiempo a medida que el cuerpo se adapta al medicamento. Sin embargo, es importante tener en cuenta que en personas con problemas renales, estos síntomas pueden agravar la condición, especialmente si causan deshidratación.

A largo plazo, los principales beneficios de Ozempic incluyen el control de los niveles de azúcar en sangre y la posible pérdida de peso en personas con diabetes tipo 2 y/o obesidad. Los efectos secundarios de este medicamento son los siguientes:

Cansancio

La fatiga o el cansancio no son efectos secundarios comunes de Ozempic. Sin embargo, como con cualquier medicamento, algunas personas pueden experimentar estos síntomas como resultado de la enfermedad subyacente (en este caso, la diabetes) o debido a otros factores individuales.

Náuseas

Las náuseas son uno de los efectos secundarios más comunes de Ozempic, especialmente al comienzo del tratamiento. Estas náuseas suelen disminuir con el tiempo a medida que el cuerpo se adapta al medicamento.

Hipoglucemia

Aunque Ozempic no causa hipoglucemia por sí mismo, puede aumentar el riesgo si se toma junto con otros medicamentos para la diabetes que pueden reducir los niveles de azúcar en sangre. Por lo tanto, es importante monitorear los niveles de glucosa en sangre mientras se usa Ozempic y ajustar la dosis de otros medicamentos en consulta con un profesional de la salud.

Tendencias suicidas

No hay evidencia sólida que sugiera que Ozempic cause tendencias suicidas. Sin embargo, cualquier cambio en el estado de ánimo o pensamientos suicidas debe ser reportado de inmediato al médico. El comité de seguridad de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) y el Comité de Evaluación de Riesgos de Farmacovigilancia (PRAC) están analizando datos relacionados con el riesgo de ideación suicida y autolesión en pacientes que consumen medicamentos denominados agonistas del receptor GLP-1.

Esta revisión se originó a partir de la agencia de medicamentos de Islandia, debido a informes y denuncias de individuos que consumían liraglutida y semaglutida. Hasta ahora, las autoridades han recolectado y están estudiando cerca de 150 reportes sobre posibles casos de autolesión e ideación suicida.

Aún no está definido por los expertos si los casos informados están vinculados directamente a los medicamentos, a las condiciones preexistentes de los pacientes o a otros elementos.

Efectos secundarios atribuidos a condiciones psicológicas

Algunas personas pueden experimentar efectos secundarios que afectan su estado de ánimo o bienestar psicológico mientras toman Ozempic, aunque estos efectos son poco comunes. Si se experimentan cambios significativos en el estado de ánimo, es importante comunicarse con un profesional de la salud para evaluar si el medicamento es adecuado.

En los últimos meses, los pacientes que consumen este fármaco, no solamente han tenido problemas en relación con algún trastorno gástrico o corporal, sino vinculado a la salud mental. Algunos pacientes han manifestado cuadros de depresión, angustia, tristeza permanente y cambios en su estado de ánimo.

La primera consecuencia tras finalizar el tratamiento es el aumento de los niveles de glucosa en sangre que Ozempic controlaba. Esto lleva a picos de glucosa que, en el caso de pacientes con diabetes, pueden ser peligrosos. A esto se le suma también que regresa el apetito y que no se consigue tan rápidamente la sensación de saciedad como ocurría con el uso del medicamento. Esto puede llevar a los pacientes a recuperar el peso perdido, dándose un efecto rebote.

Efecto rebote con Ozempic, ¿Qué es y cómo afecta a los pacientes?

El efecto rebote, si bien no es común con Ozempic, puede ocurrir si una persona interrumpe abruptamente su uso. Este fenómeno se caracteriza por un aumento repentino en los niveles de azúcar en sangre, pero no se considera específicamente un efecto rebote del medicamento en sí. Más bien, puede surgir debido a la falta de control de hábitos de vida que acompañen el tratamiento. Por ejemplo, aquellos que han perdido peso mientras toman Ozempic, pero no modifican sus hábitos pueden experimentar un aumento de peso considerable después de suspender el medicamento. Esto se debe a la recuperación del apetito y la pérdida de la sensación de saciedad que Ozempic ayudaba a controlar, lo que lleva a una ingesta calórica excesiva y, como resultado, al efecto rebote.

No es común que Ozempic cause un efecto rebote significativo en los niveles de azúcar en la sangre. De hecho, su mecanismo de acción está diseñado para estabilizar los niveles de glucosa en sangre al estimular la liberación de insulina y reducir la producción de glucosa en el hígado. Sin embargo, si una persona deja de tomar Ozempic de repente, puede experimentar un aumento en los niveles de azúcar en sangre, pero esto no sería específicamente un efecto rebote del medicamento.

“Ozempic face”: ¿Envejecimiento repentino?

El uso de Ozempic puede provocar una pérdida de grasa en todo el cuerpo, incluyendo la cara. Este medicamento puede acelerar el proceso natural de pérdida de los depósitos grasos que se encuentran debajo de la piel facial, los cuales tienden a disminuir con el tiempo y el envejecimiento. Sin embargo, al tomar Ozempic, este proceso puede intensificarse, lo que puede resultar en un aspecto facial más envejecido.

La disminución abrupta y significativa de la grasa facial puede hacer que las líneas de expresión sean más prominentes, que los pómulos se vean más marcados y que las mejillas presenten un hundimiento. En resumen, en algunos casos, el uso de Ozempic puede contribuir a un aspecto facial que refleje un mayor envejecimiento.

Consideraciones específicas y riesgos asociados

Es importante destacar que Ozempic no suele causar hipoglucemias graves por sí mismo, pero puede aumentar el riesgo de hipoglucemia cuando se combina con otros medicamentos para la diabetes que reducen los niveles de azúcar en sangre. Además, se ha planteado la posibilidad de efectos psicológicos adversos, como cambios en el estado de ánimo, aunque estos son poco comunes.

Conclusiones

Ozempic es un medicamento efectivo para el control de la diabetes tipo 2 y la obesidad, pero su uso conlleva consideraciones importantes. Los pacientes deben ser conscientes de los posibles efectos secundarios a corto y largo plazo, así como de los riesgos asociados, como el efecto rebote y el aumento del riesgo de hipoglucemia cuando se combina con otros medicamentos. Es fundamental que los pacientes mantengan una comunicación abierta con sus profesionales de la salud para gestionar cualquier preocupación o efecto secundario que puedan experimentar durante el tratamiento con Ozempic.

(Artículo escrito con la colaboración del estudiante de prácticas de psicología, Sergio Murgadas.)

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