¿Cuándo y por qué una operación de obesidad?
La Asociación Americana de Cirugía Bariátrica y Metabólica (ASMBS), ha recomendado recientemente las operaciones de obesidad cuando el IMC es mayor de 35. (calcule su IMC)
Sin embargo no se tratan números sino pacientes, y cada caso debe individualizarse. En realidad es el propio paciente que más se conoce a sí mismo, y es él quien suele pedir la ayuda de una operación, justificada por «ya no puedo controlar el peso», «esto se me va de las manos», «ya no soy capaz de realizar una dieta y mantener la pérdida de peso»… (aun así, muchas personas muy exigentes con su aspecto físico, tienen estos sentimientos con sobrepesos moderados).
Las condiciones que el paciente debe cumplir para aconsejar una operación serían:
- IMC > de 35.
- Obesidad de más de 3-5 años de evolución, que va aumentando progresivamente.
- Que haya sido tratado por especialistas en obesidad, y conseguido perder peso (aunque luego lo haya recuperado).
- Que padezca enfermedades susceptibles de mejora con la pérdida de peso (se incluyen las alteraciones emocionales).
- Que tenga familiares directos con obesidad (abuelos, padres, hermanos).
Cuando el paciente cumple cuatro o más de estas condiciones (siempre con el IMC > 35), sabemos que la obesidad va a seguir aumentando progresivamente, y que una operación de obesidad va a cambiar la vida del paciente, curando problemas existentes, previniendo la aparición de enfermedades, y mejorando la calidad de vida en el día a día.
Es en estos casos cuando le decimos al paciente: «En su caso el beneficio de la operación, compensa el riesgo al que se va a someter.»